Desde que llegué a esta ciudad una de las cosas que más me ha gustado es el fácil acceso que tenemos a la lectura, no solo por su servicio de bibliotecas públicas que es excelente, si no por la labor comunitaria que hay alrededor de ello. Es así como nace “Book Exchanges“, una iniciativa comunitaria que busca compartir e incentivar el habito de la lectura.
De esta manera, un grupo de personas o una persona en particular construyen o adquieren un pequeño gabinete generalmente en madera y de puertas de vidrio, que se ubica en un espacio público, en un lugar visible para los transeúntes. Se colocan algunos libros y algún anuncio particular que motive a tomar o dejar un libro, puede ser de manera anónima o con una nota específica. Esto garantiza que los libros roten frecuentemente y el usuario o usuaria no se preocupe por la cantidad de libros que dona o que toma del mismo.
Estas son mini-bibliotecas que están abiertas las 24 horas del día todos los días del año, fomentando el espíritu comunitario, propiciando un lugar de encuentro para conectar con la lectura compartiendo nuestros libros favoritos.
Si vives en Vancouver, aquí está un mapa de estas hermosas cajitas de libros. Si no, dejame saber si también existe en tu ciudad o sí es una iniciativa que puedes replicar.